El Aceite de Oliva, aliado en la salud cardiovascular
22 de Diciembre de 2022
Instituciones como la Fundación Española del Corazón (FEC) recomiendan el consumo diario de aceite de oliva virgen extra para proteger nuestra salud cardiovascular. El aceite de oliva, símbolo de nuestra cultura, es un alimento indispensable en nuestra dieta gracias a sus excelentes propiedades.
Estudios alrededor del mundo, como el estudio PREDIMED, corroboran la afirmación de la FEC y van más allá: las personas que consumen más aceite de oliva, están más protegidas contra las enfermedades cardiovasculares. Incluso, estos estudios relacionan también el consumo del aceite de oliva virgen extra con la reducción del riesgo de padecer otras enfermedades, como diabetes o Alzheimer.
Veamos por qué.
Características saludables del aceite
La mayor parte del aceite de oliva virgen extra se compone de ácidos grasos monoinsaturados, especialmente, de ácido oleico. Este regula la cantidad de colesterol en sangre, disminuyendo los niveles de colesterol LDL (colesterol malo), aumentando además los niveles de colesterol HDL (colesterol bueno).
Por otra parte, el aceite de oliva, siempre que sea virgen extra, es conocido por ser fuente de polifenoles. Estos son los denominados antioxidantes naturales por excelencia. Los polifenoles son unos compuestos que se encuentran en los alimentos de origen vegetal y tienen propiedades antiinflamatorias y antitrombóticas, siendo recomendados para proteger nuestra salud cardiovascular.
Además, el aceite de oliva virgen extra también contiene ácidos grasos Omega3. Aunque se recomienda un consumo moderado de estos tipos de grasos, en el aceite de oliva virgen extra se encuentran de forma equilibrada y no suponen un peligro. El Omega3 se consideran para disminuir los niveles de triglicéridos, en la prevención de arritmias o para reducir el riesgo de trombosis, entre otros.
Beneficios en el sistema cardiovascular
Sabiendo que el aceite de oliva virgen extra es rico en ácidos grasos monoinsaturados, polifenoles y vitaminas, veamos qué beneficios pueden ejercer en nuestro sistema cardiovascular:
- Regulan los niveles de colesterol en nuestro organismo.
- El aceite de oliva virgen extra hace frente a la arterioesclerosis (proceso de estrechamiento y endurecimiento de las arterias debido a la pérdida natural de elasticidad asociada al trascurso de la edad), responsable de un gran número de enfermedades cardiovasculares como infarto de miocardio, hipertensión arterial o angina de pecho. Los polifenoles del aceite de oliva virgen extra actúan retrasando el trascurso del tiempo gracias a sus propiedades antioxidantes.
- Gracias a las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias del aceite de oliva, favorece la función del endotelio. Este es el responsable de cubrir las paredes de las venas y arterias de nuestro cuerpo, que pierden flexibilidad con el paso del tiempo.
- La presión arterial alta (hipertensión) puede desarrollar enfermedades cardiovasculares y es peligrosa porque no presenta síntomas. Además de evitar el tabaco y el alcohol y hacer ejercicio con regularidad, existen una serie de recomendaciones nutricionales. Una de ellas es consumir una dieta mediterránea, rica en aceite de oliva virgen extra. Los polifenoles del aceite de oliva aportan mayores concentraciones de óxido nítrico, los cuales disminuyen el estrés oxidativo y el riesgo isquémico.
- El aceite de oliva contiene una proteína capaz de protegernos de las enfermedades cardiovasculares, ya que inhibe la formación de agregaciones plaquetarias que pueden conducir a una trombosis. El estrés oxidativo postprandial disminuye con las grasas monoinsaturadas, como el ácido oleico del aceite de oliva. La trombosis, de hecho, consiste en la formación de trombos dentro de los vasos sanguíneos, causando la oclusión y dificultando la circulación sanguínea normal.
- El aceite de oliva virgen extra tiene efectos protectores contra las dislipidemias (reduce el colesterol malo y aumenta el bueno) y la aterosclerosis. También reduce el riesgo de ataque cardíaco e hipertensión y es capaz de frenar el envejecimiento, especialmente por la composición en ácidos grasos y vitaminas y sus propiedades antidiabéticas y antitumorales.
- El aceite de oliva es hipocolesterolémico, es decir, reduce la absorción intestinal del colesterol que contienen los alimentos y, dado el alto contenido de polifenoles, limpia la sangre y los vasos sanguíneos.